¡Feliz año a todos! El 2022 es un año de número 6, que explora la consciencia, intuición y expansión. Los cambios siguen, pero estamos mucho mejor para trabajar por ellos, más serenos y en búsqueda de la paz.
Seleccionamos ciertos cristales, que pensamos, nos ayudarán este 2022 con estos aspectos, partiendo por:
La amatista es una gran protectora y transmutadora, alivia dolencias sobre todo dolores de cabeza y afecciones en esa zona por su relación con el tercer ojo. La amatista es muy espiritual e intuitiva, trabaja con el rayo violeta que todo sana y llena de poder. ¡Revisa la sección de amatista aquí!
La pirita tiene afinidad con dos grandes chakras; nuestro plexo solar con centro en el abdomen que se relaciona con la fortaleza y seguridad, y el chakra corona que es el nexo que tenemos con el universo. Atractora de la abundancia y potenciadora de nuestras meditaciones.
Infalible y fiel compañero, es un comodín ya que es afín a todos los chakras y potencia cada energía que queramos trabajar. Es "la luz cristalizada" y un maestro sanador. Deposita todas tus intenciones en él.
Alegre y vibrante, la piedra del sol nos ayuda a conectar con la fuente divina y solar que nos da energía, vitalidad y motivación. ¡Muy buena para los niños! Para la felicidad, éxito y prosperidad, llévala junto a ti.
La sodalita es muy buena para la mente tanto para la concentración porque ayuda a centrarse en un propósito y concretar, como también para lo espiritual siendo muy buena en meditaciones. Nos ayuda a involucrarnos, comunicar y participar de grupos que sean afines a nosotros y nuestras metas en la vida. Selección de sodalita aquí.
Para la expansión y la comunicación también, para abrir la mente y el corazón hacia experiencias enriquecedoras espiritualmente y hacia nuestro verdadero ser. Ayuda mucho con la ansiedad, medita un poco con ella colocándola en la garganta.